Decía el Padre Champagnat sobre nuestra Madre: «Sin María no somos nada y con María lo tenemos todo, porque María tiene siempre a su adorable hijo o en sus brazos o en su corazón».
El día viernes 31, la familia Sanjosefina acompañó a nuestra Buena Madre desde muy temprano, con el mismo amor que nuestro padre Champagnat enseñó a los primeros Hermanos, en el ya tradicional “Rosario de la aurora”, donde alumnos, padres de familia, exalumnos y profesores, se unieron en una sola voz para rezar a la Madre de Dios.
Ahí, los estudiantes integrantes de la Promoción 2019: «Hno. Henri Vergès», realizaron una práctica muy particular y querida por el P. Champagnat: la consagración ante nuestra Buena Madre.
Autor: Socorro Manrique